LA DEBACLE DE SMAPA

Jacob Aquino Muñoz.

28 de junio de 2013.

Mi artículo de ayer, lo inicié diciendo que anteriormente, el Sistema de Agua Potable y Alcantarillado (SMAPA) de Tuxtla Gutiérrez, ganaba premios a nivel nacional como el mejor organismo público de administración del agua potable del país. ¿Cómo pasó de tal prestigio al actual desprestigio? ¿Cómo se logró construir su destrucción?

Bueno, casualidades de la vida. Ayer mismo me invitaron y asistí a una reunión en el Colegio de Ingenieros Civiles de Chiapas, donde asistirían los directivos de SMAPA para exponer los motivos que motivan la privatización de SMAPA.

Lo primero que hicieron los directivos de SMAPA, fue sacar su pistola para marcar su territorio. Que ellos solo expondrían datos técnicos del proyecto, nada que ver con la política de políticos de sexenios anteriores y actuales.

Para reforzar sus dichos con hechos, terminando de hablar, el director general de ese organismo salió despavorido, dejando a su segundo de a bordo recibir todas las críticas. Conforme iban subiendo de tono los comentarios, los cachetes del funcionario iban poniéndose igual de rojos, no sé si del coraje o de la vergüenza.

De los pocos datos técnicos que pude observar en la presentación, comprobé mi principal sospecha. La debacle de SMAPA inició a 6 meses de llegar Juan Sabines a la presidencia de Tuxtla Gutiérrez y, por ende, como mandamás de ese organismo.

Solo 6 meses, lea bien, solo 6 meses, le tomó de tiempo a Sabines para acabar con la trayectoria del que hasta ese momento estaba catalogado como el mejor organismo operador del agua a nivel nacional. Todo un record que ya está inscrito en los libros de Guinness. Bien dice el dicho que “para construir se necesitan años y gigantes, para destruir solo basta un enano y un instante”.

El motivo del inicio de la debacle, según expusieron los funcionarios de SMAPA, fue la construcción de “Ciudad del Agua”, proyecto que se construyó con puros créditos, sin considerar la capacidad financiera de SMAPA para pagarlos. Sí, hay que reconocerlo, “Ciudad del Agua” contribuyó a solucionar la escasez de agua en varias zonas de la capital, pero el precio que habremos de pagar serán muy altos y a muy largo plazo.

Si eso no bastaba, pues era necesario echarle más mierda al asunto. Si, leyó usted bien, mierda al asunto. Se trata del proyecto para solucionar el problema de tratamiento de las aguas negras. Hace años, la autoridad ambiental federal, le aplicó SMAPA una tunda, con una senda multa de mil millones de pesos.

Para solventarlo o al menos hacer la finta de querer hacerlo, los funcionarios públicos más inteligentes del planeta, hicieron un proceso de licitación y contrato con una compañía para construir 2 plantas de tratamiento y operar el sistema de aguas residuales. El contrato fue de más de 700 millones de pesos. Excelente, dijimos todos los tuxtlecos, incluidos los “popodrilos” y “cacagartos” que viven en el Río Grijalva.

Pues no, no es posible hacerlo, porque a los lindísimos funcionarios públicos no se les ocurrió que se necesita “paga” para hacer obra. Violaron leyes y normas por doquier por esa situación. Ahora no solo deben pagar la multa de mil millones, que con actualizaciones ya debe andar en dos mil, también deben de pagarle a la empresa por no hacer nada. El contrato firmado obliga el pago de casi 5 millones de pesos a dicha empresa. Primor de contrato.

Toda parece indicar que cuando tocas el tema de SMAPA, la caca flota por todos lados. Igual sucede con el “Conejobus” y “Proactiva”, temas que huelen peor que la basura.

Por eso, y otras cosas más, SMAPA se ahoga y no con agua precisamente. La salida propuesta, según ellos, es tener recursos privados para el salvamento. Que el contrato será una chingonería de transparencia. Que lo van a licitar públicamente. Que van a pedir que el operador no sólo tengan experiencia en sistemas telefónicos, sino también en el manejo del agua y la caca. Caray, Don Slim no maneja muy bien el agua, pero la caca creo que sí. Será competidor fuerte en la licitación.

Del tema del fraude, desfalco, desvío de recursos, castigo a funcionarios responsables, ni pío. Es tema tabú para ellos.

No va a pasar nada. Nada de castigos ni responsabilidades. Poco a poco, los ciudadanos nos vamos convenciendo que “del palo de un sabino, solo nacen nuevos sabinitos”. Pues que esperaban. “Para que la cuña apriete, no deben ser hijos del mismo palo”