Jacob Aquino Muñoz.
30 de diciembre de 2013.
Mal inicia el año para quién se empieza ahorcar desde el primero de enero. Así parece que sucederá con la estrategia financiera que ha diseñado el gobierno estatal. Empieza mal y posiblemente termine peor.
Por primera vez, el presupuesto de egresos del Estado de Chiapas para el ejercicio fiscal 2014, fue presentado con un déficit del 18% con respecto al proyecto de ingresos calculado.
Según información disponible en diversos medios informativos digitales, el presupuesto de egresos que propone el gobierno de Chiapas, sería de 78 mil 61 millones de pesos, y el presupuesto de ingresos sería de 76 mil 238 millones de pesos, es decir, registrará un déficit de mil 823 millones de pesos.
Nunca había sucedido algo así en Chiapas, que el presupuesto de egresos fuese mayor al presupuesto de ingresos autorizado. Esa diferencia negativa se llama déficit público y puede constituirse, incluso, en un problema mayor al causado por el excesivo endeudamiento del sabinismo.
Tradicionalmente, el presupuesto gubernamental ejercido cada año es superior al autorizado, pero es soportado con el incremento en los ingresos, cuando el dinero está en la caja, no como ahora, que se autoriza gastarlo sin tener las perspectivas de recurso suficiente.
Además, la propuesta deficitaria del presupuesto público estatal 2014, desmiente la información que ha circulado en miles de spots publicitarios gubernamentales y en los dichos de funcionarios, que el gobierno había alcanzado el saneamiento en sus finanzas.
No es posible comprobar las cifras gubernamentales que lo avalen, porque, lamentablemente, la opacidad informativa gubernamental cabalga de nuevo en Chiapas.
La opacidad informativa gubernamental era algo superado y actualmente es un serio retroceso. Por ello, Chiapas está en la cola en las calificaciones sobre transparencia, cuando hace unos años, era la entidad más relevante a nivel nacional.
Hoy en día, a pesar de que las normas lo obligan, la información financiera y contable gubernamental de Chiapas no está disponible al ciudadano y, por lo tanto, no es posible analizar los datos que permitan conocer la situación financiera gubernamental. Bueno, ni el reciente informe de gobierno está disponible.
Por ello, solo conocemos las afirmaciones de los funcionarios públicos que las finanzas públicas de Chiapas están sanas, pero la propuesta de un déficit público del 18% no refleja ninguna sanidad, es todo lo contrario, demuestra un enorme desequilibrio financiero.
Me preocupa profundamente que esta situación se esté presentando en Chiapas, es una alternativa financiera inviable, porque este déficit público solo podrá ser soportado con nuevos financiamientos y nuevas cargas fiscales para el ciudadano, como el reemplacamiento de este año.
Es una profunda lástima que, después de un año en el gobierno, aún no hayan entendido o aceptado el grave problema financiero que tiene el sector público de Chiapas. La única solución que han aplicado son nuevos créditos y mayores gravámenes.
Aun cuando apliquen constantemente esa mala receta, los ingresos públicos ya no pueden soportar la enorme carga burocrática que actualmente tiene el gobierno. Lo que deben hacer, de manera urgente, es reducir la estructura de la administración pública, para adecuarla a su capacidad de ingresos.
Nada se ha hecho al respecto. El gasto público soportado a través de la contratación de deuda y mayores contribuciones fiscales, solo agravan más el problema e impacta aún más la economía de los ciudadanos.
Los nuevos contratos de deuda pública serán un paliativo para unos cuantos meses, y, si la situación de la economía no cambia, más temprano que tarde el gobierno estará recortando presupuesto a las dependencias y, lo que es peor, no podrá sufragar el gasto comprometido. Los proveedores sufrirán las consecuencias.
Otro asunto grave de la excesiva carga burocrática es que el gasto corriente se puede “comer” en su totalidad al gasto de inversión, si es que aún no lo ha hecho ya.
Si además de más deuda y más contribuciones fiscales, el gobierno soporta sus necesidades financieras de gasto corriente con los pocos recursos que le quedan al gasto de inversión, entonces mejor nos preparamos para lo peor, porque la economía y el empleo en Chiapas proseguirán en picada.
Por todos lados, por donde se muevan, sin hacer lo administrativamente correcto, las cosas irán de mal en peor. Lamentablemente, todo parece confirmar que el gobierno seguirá nadando en la ruta menos conveniente.
Página web http://www.letrasvivas.com.mx/
Artículo publicado en "Es Diario Popular" http://www.esdiario.com.mx/opinion/17357-preocupante-deficit-publico
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